SUCESO.
NICARAGÜENSE
MUERE DESANGRADO TRAS RECIBIR UN IMPACTO DE BALA POR POLICÍA COSTARRICENSE.
Henry Ruiz López
de 45 años de edad, murió desangrado luego de recibir un impacto de bala en una
de sus piernas tras haber desobedecido una orden de alto por oficiales de la
fuerza pública de Costa Rica.
El hecho se presentó
a eso de las 11: 22 pm del pasado lunes, en aguas del rio niño, en el lugar
llamado Parcelas de Villa Hermosa, en Upala, Alajuela, a dos kilómetros de la
frontera con Nicaragua, confirmo el ministerio de seguridad pública y la cruz
roja Costarricense.
López era
originario de la comunidad Colon, un poblado del municipio de cárdenas, en el
departamento de Rivas Nicaragua.
De acuerdo con la
información oficial, la noche del lunes, 14 efectivos del grupo de apoyo
operativo (GAO) se encontraba en vigilancia sobre el rio niño, pues habían recibido
información confidencial de contrabando procedente de Nicaragua.
“A las 11: 22 pm,
los policías observaron cinco botes que venían desde el sector fronterizo con
Nicaragua hacia Upala, los oficiales les dieron la orden de alto, pero los
ocupantes de las embarcaciones al parecer abrieron fuego, razones por la cual
los policías respondieron”. Reza la información oficial.
“Tres de los
botes se detuvieron y luego se acercaron a donde estaban los policías. Otra de
las embarcaciones prosiguió y se detuvo a unos 100 metros de distancia, la
quinta escapó”. Menciona el informe.
Según la versión oficial,
los agentes llamaron a la cruz roja para atender el herido, sin embargo al
llegar al lugar, los socorristas determinaron que el hombre se encontraba sin
vida.
Seguridad pública
confirmo que en los botes transportaban mercadería de contrabando, la mayoría se
trataba de abarrotaría.
El caso fue
puesto a la orden del organismo de investigación judicial y ministerio público.
En el operativo fueron
detenidas cinco personas de nacionalidad Nicaragüense que iban a bordo de los
botes, identificados solo con los apellidos, Ramos Barahona de 22 años, Ramos Cárdenas
de 25 años, Ramos de 43, Ruiz Ramos de 27 y un menor de edad.
Los Nicaragüenses
fueron puestos a la orden del ministerio público, para que se les determine la situación
jurídica de cada uno.
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