APUÑALAN A MUJER Y LA ARROJAN A UN CAUCE.

APUÑALAN A MUJER Y LA ARROJAN A UN CAUCE.
Ángela Verónica Crespo es el nombre de la mujer cuyo cuerpo apareció la mañana de ayer, en un cauce ubicado en el asentamiento Luis Alfonso Velásquez, ubicado dentro del barrio San Judas.

La joven de 22 años, había salido el domingo con un hombre de unos 60 años, identificado únicamente como Carlos y  quien labora en una arenera cerca del asentamiento Los Martínez.

Los vecinos que viven en el sector del cauce, alertaron a las autoridades al sentir el olor fétido que desprendía el cuerpo. La mañana de ayer, los agentes encontraron el cuerpo de Crespo en dos bolsas negras y amarradas con retazos de una manta publicitaria al fondo del cauce.

Los familiares de la joven que actualmente estaba desempleada, la identificaron por la vestimenta, ya que Crespo usaba una camisola azul y una blusa rosada.  Extraoficialmente se conoció que el cuerpo de Crespo tenía seis heridas de armas blancas en el cuello, pero la Policía Nacional no ha brindado datos oficial sobre el crimen.

“Ese señor de 60 años no vino a trabajar ayer (lunes), hasta hoy (martes) apareció y todavía con tufo a guaro. Me alegré cuando lo vi y le pregunté por mi hija. Lo vi nervioso y dijo que solo se bebieron dos litros (de cerveza) en un bar del mercado Israel Lewites y que ahí la dejó, luego dice que no supo de ella”, dijo Francisco Díaz Mendoza, de 48, padre de la víctima.

También figura como sospechoso la pareja actual de Crespo, un sujeto identificado solo como Gabriel con quien tenía cinco meses de convivir.

“Hoy (martes) vino la mamá de Gabriel a llevarse lo poco que le había dado a mi hija, unos pantalones y hasta la provisión. Él trabaja de vigilante y se enojó al venir ayer (lunes) y no la encontró, entonces se fue”, dijo doña Carmen Crespo, mientras era asistida por sus vecinos.

“Él (Gabriel) le daba mala vida a mi hija, mucho peleaban porque él, le pegaba a sus dos niños de dos y seis años, que no eran sus hijos y mi hija los defendía. Yo le dije la última vez que le iba a echar la Policía”, recordó doña Carmen.

N/D

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