El cadáver de un menor de edad, originario de Nicaragua, fue
encontrado este domingo en unos matorrales en inmediaciones del río Choluteca,
Comayagüela. Hasta el lugar se desplazó personal de Medicina Forense, que hizo
el levantamiento e identificación del pequeño.
Se informó que el menor, de
10 años de edad, tenía signos de haber sido abusado sexualmente. Entre los
matorrales se encontró la ropa y los zapatos de los que el agresor despojó a su
víctima.
El padre del menor de edad
dijo que era la primera vez que traía a su hijo a Honduras, para vender
alcitrones y llevar el sustento a su familia.
Con notorio dolor, el señor
Raúl Pérez detalló que el pequeño tenía problemas de retraso, lo que lo hacía
un niño inquieto y despistado. “Se me perdió del parque, cuando andaba
vendiendo alcitrones (dulces derivados de la papaya), me preguntó por unas
estatuas, pero yo estaba dando un vuelto, cuando vi ya no estaba a mi lado”,
relató.
El progenitor agregó que
decidió traer a su hijo a Honduras porque cuando regresaba a Nicaragua le
ponían mucha queja, porque le gustaba andar en la calle, ayudando a
recolectores de basura, panaderos y otras personas de la comunidad.
“Era un niño especial, era
hiperactivo, en el cumpleaños bailaba y en Nicaragua era bien popular, no sé
cómo diré esta noticia”, lamentó. Pérez, entre lágrimas, dijo que “es la
primera vez que lo traigo a Honduras y desgraciadamente lo voy a llevar
muerto”.
Para el padre del menor, Dios
lo cuidó “bastante”, porque el pequeño se le atravesaba a las motocicletas y
los vehículos por su problema mental.
Raúl Pérez, padre del niño, expresó
que pidió ayuda al consulado de Nicaragua en Honduras para que agilicen la
entrega del cuerpo.
Indicó que mientras visitaba
Honduras se hospedaba en un hotel para luego regresar a su país con dinero para
el sustento de su familia.
FUENTE: HOY
RADIO MANANTIAL 102.5 FM
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